viernes, 5 de junio de 2020

Comparsa Guaracheros de Regla, una herencia bien defendida


Cuando el cinco   junio de 1959 en el ultramarino pueblo de Regla se fundó la comparsa Los Guaracheros de Regla, los creadores no imaginaron que trascendería en el tiempo como una de las más emblemáticas de la Isla.


Humberto Medina (El Guarachero Mayor), fue uno de los afortunados en iniciar el formato danzario que se ha erigido en estandarte de las tradiciones carnavalescas habaneras y cubanas.

Humberto Medina
Para este hombre, ser Guarachero equivalía a ser Cuba, lo que nos confesara en una entrevista: "...porque desde sus inicios los integrantes se identificaron plenamente con la causa de la Revolución naciente...", comentó.


Guaracheros ha tenido como premisa el amor al trabajo, a la música, a Cuba y a la cultura nacional y sobre esa base ha transitado como formadora de buen gusto en materia de fiestas populares.

Sus coreografías, vestuarios y música han tenido siempre un sello de identidad, logrando posiciones cimeras en el gusto de cubanos y extranjeros.

A la figura de Alberto Mir Medina, también se debe mucho del éxito de Guaracheros, por ser él uno de sus más importantes directores y quien promocionara su actuar en la arena internacional, especialmente en el famoso Carnaval de Veracruz (México), plaza donde la agrupación cubana sentó cátedra y cosechó muchos de sus principales lauros.

La familia Medina ha sido parte inseparable de esta agrupación que hoy celebra 61 años, actualmente Héctor Medina la dirige, siguiendo los pasos de su padre y de otros miembros de su  estirpe.

Entre los principales aportes de los Guaracheros de Regla sobresale la singular manera de bailar, del que se han apropiado la mayoria de las formaciones que defienden esta festividad popular.

El "paso del Guarachero" se ha hecho tan popular que la mayoría de las comparsas habaneras lo han incluído en sus coreografías.

Por eso cuando se escribe sobre la historia de la cultura popular cubana es imposible olvidar a esta formación danzaria que revolucionó el Carnaval con una evolución danzaria peculiar.

¿Tradicional o contemporánea? Esa es otra interrogante que a 61 años está por redefinir, si bien su concepción difiere de las agrupadas en el primer grupo (Componedores de Batea, Alacrán, Las Bolleras, y otras que cuentan una historia llegada de etapas pre revolucionarias), la emblemática formación carnavalezca ha trascendido en el tiempo, con significativos aportes.

De su continuidad no hay dudas

La continuidad de Guaracheros de Regla está garantizada, lo que se evidencia en una formación juvenil que desde hace más de tres décadas sigue sus pasos.


Guaracheritos, es la comparsa infantil que cada noche del paseo carnavalesco habanero hace estragos en el Malecón citadino con la calidad de sus coreografías, interpretaciones y vestuario.


En ella se forman los futuros bailadores de la estructura de adultos, quienes son captados a partir de sus habilidades para el baile, su disciplina y el deseo de darle continuidad a la labor desarrollada por sus sus antecesores.

Belleza en el vestuario, limpieza en el desfile, respeto por la tradición y una nómina de jóvenes comprometidos con el arte popular; son los elementos que han distinguido a quienes ahora siguen a Héctor Medina en el empeño de mantener viva esta herencia.

domingo, 31 de mayo de 2020

Los niños en Cuba encuentran espacio en el arte


Desde 1956, la Asamblea General de las Naciones Unidas instituyó el primero de junio como fecha para la consagración a la fraternidad y  la comprensión entre los niños del mundo. 

Según acuerdo del Organismo Internacional   cada país debería promover actividades que involucrasen de manera directa a los más pequeños de cada casa, lo cual se cumple en Cuba, en contraposición al bloqueo y las políticas enfermizas que desde el triunfo de la Revolución han aplicado las administraciones estadounidenses.


Ejemplo de lo antes dicho se expone en las acciones que para ese grupo se diseñan desde las instituciones culturales cubanas.

Casas de Cultura, compañías de danza y de teatro, casas discográficas, sellos literarios, museos y muchas otras entidades tienen en sus encargos sociales la satisfacción de sus espectativas, cómo manifestación del empeño estatal.

La Compañía infantil de teatro La Colmenita se ha consagrado como templo para el crecimiento intelectual y emocional de no pocos pequeños de toda la Isla y de muchísimas naciones.

De igual manera en este Día Internacional de la Infancia es válido reconocer la destacada labor que desempeñan los profesionales del Ballet Lizt Alfonso Dance Cuba, quienes han sido capaces de garantizar su continuidad a través de un diseño inteligente e intencionado, en el que desde tempranas edades comienza la preparación de quienes en el futuro formarán parte de la nómina profesional.

Los colectivos de instructores de las Casas de Cultura, llamadas a ser las instituciones más importantes de la comunidad, tiene  en su haber logros significativos en talleres de creación y apreciación en las diferentes manifestaciones, siendo acreedoras de premios y reconocimientos en diferentes certámenes.

Concursos como De donde crece la Palma, las ediciones del Carnaval Infantil en cada provincia, la participación en certámenes de música y literatura son ejemplo de ello.

En este particular una nueva opción pueden encontrar los pequeños con inclinación hacia el baile de ritmos cubanos: en la joven compañía Kubasoy, agrupación que con sede en el habanero municipio Diez de Octubre desde hace poco más de dos años dedican parte de su tiempo a la enseñanza del Son, la Rumba y el baile de Casino, por sólo citar algunos.

Esta joven formación ha logrado, cada verano aglutinar a cientos de personas, de todas las edades en el Casino de Kubasoy, iniciativa que también ha hecho un espacio especial para los más pequeños.

Vale comentar, de igual forma, la labor que desde el tratamiento a las expresiones de la danza popular y tradicional folclórica desempeña el Conjunto Folklórico Nacional de Cuba.

Una "escuelita", cómo se le conoce popularmente, donde hace más de dos décadas se imparten clases de danzas afrocubana y populares a niños mayores de nueve años, y de la que han egresado muchos de los que hoy forman parte de la legendaria compañía.

Sería muy extensa la lista de acciones que desde instituciones culturales tienen en Cuba a los niños como principales destinatarios, a quienes llegan con atractivos programas, pensados sobre todo desde una perspectiva educativa y enriquecedora.

Niños que son felices en esta Isla del Caribe, aún en tiempos de COVID, porque hay toda una nación velando por ellos.