A partir del 19 de octubre comenzará el Festival
de Teatro de La Habana, evento que celebrará su edición XVIII y sobre el que dialogamos con Omar Baliño, curador general
de la muestra, quien en relación con los
criterios tomados en cuenta para seleccionar las obras que finalmente llegará
al público, comentó:
“…para la muestra extranjera
trabajamos menos con las proposiciones que llegan voluntarias de otros países,
que había sido la manera habitual para el Festival.
Esta vez lo curamos viendo
más el teatro en sus espacios originales, y calculando mejor dónde funcionarían
esos espectáculos en La Habana, lo que fue ventajoso en ese sentido.
Mantuvimos como premisa de
trabajo el hacer un “arco” de intereses, que siempre es diverso para nuestro
público, y que incluye a los profesionales.
Para la muestra nacional
vimos mucho teatro en todo el país de manera sistemática y aplicando una
continuidad con esa política que ha remarcado el Consejo Nacional de ArtesEscénicas de Cuba, en los últimos años, de legitimar la zona más laboriosa y
creativa de nuestro teatro”.
Esta edición del Festival de
Teatro de La Habana se dedicará a la figura de Vicente Revuelta, sobre lo que
Baliño apuntó: “ …veremos su figura hecha memoria y escena viva, porque el
Festival estará lleno de hilos y acciones que nos conectan con él, desde la
mirada para la selección.
Zonas con las que Vicente
tuvo relación, o autores, etilos, elementos de identidad teatral o cultural, y
hasta la puesta metafórica de qué teatro estaría él haciendo en la actualidad,
ya que fue siempre un renovador constante…”
Una treintena de obras llegarán,
hasta el 27 de octubre a la escena de los principales teatros y salas capitalinas:
Centro Cultural Bertolt Brech, Raquel
Revuelta, El ciervo encantado, Trianón,
Hubert de Blank, Adolfo Llauradó, entre otros espacios donde se presentarán
formatos de más de una decena de naciones.
Evaluando la novedad de las
propuestas y lo sugerente de los temas que traen a esta cita
habanera, el especialista señaló un grupo de sugerencias:
“…dado que la muestra
extranjera es muy pequeña, me atrevo
pensar que quien se lo proponga pude verla completa, es muy interesante
todo lo que llega, aunque debo destacar algunas piezas.
La presencia del español
Javier Aranda, quien trae un espectáculo extraordinario titulado Vida, los mexicanos de Tonglado con La repugnante historia de Clotario
Demoniax, (epectáculo de títeres y animación,
para adultos); por primera vez estará en Cuba Berliner Ensemble, con El círculo de tiza caucasiano.
También habrán opciones de danza, y volverán dos cubanos magníficos que
residen en el exterior (Jorge Ferrera a hacer
el Peer Gynt, de Ibsen, y Vivian Acosta como Electra.
Sugerimos, además, esas zonas preliminares que rompen las fronteras que
se cruzan entre la danza, el teatro y la
performance. Los hermanos de República Dominicana traerán La
vida es sueño, a
la manera del carnaval y la fiesta caribeña.
Los Internacionales
Teatro Ensemble, de Argentina presentarán Eléctrico Marx, otra vuelta de Manuel Santos
Inurrieta…”.
Teniendo en cuenta la actual situación que vive Cuba en cuanto a abasto
de combustible, se han pensado en alternativas que posibiliten el disfrute de
la mayor cantidad posible de propuestas. En ese sentido el reconocido
intelectual apunto: “...el Festival se hará y tiene concebida su realización en
distintas variantes si así lo exigieran las condiciones materiales del país.
Entre las posibles adecuaciones destaca el ajuste de algunos horarios
nocturnos, lo que no causará trastornos al público ya habitual de este evento,
por lo que en caso de necesidad se atrasarán un poco las horas de inicio para
los espectáculos más festivos, lo que será divulgado con la precisión necesaria”.