Extremando las medidas para evitar el contagio con la mortal amenaza que significa para el mundo el COVID-19, un grupo de jóvenes estudiantes y egresados de academias de artes en Cuba, se enfrascaron en materializar un sueño que verá las luces de la escena por primera vez este fin de semana.
La Sala Avellaneda del Teatro Nacional abrirá sus puertas a la Compañía Ballet Fumezcu, formato danzario y musical que tiene entre sus propósitos fusionar diferentes estilos, siempre con las técnicas del ballet como base.
Liderado por Héctor Alejandro Ramírez González, los talentosos artistas llevarán a la escena el espectáculo Identidad, propuesta conformada por 17 creaciones en las que confluyen ritmos y danzas de disímiles matrces, todas muy relacionadas con la identidad nacional.
Quienes acudan a la emblemática Sala disfrutarán de una transgresora sugerencia sobre la que su director comentó:
"...tomamos el ballet como base, porque en nuestro interés está ponderar la elegancia, el porte y la estética, desde los presupuestos que rigen la escuela cubana de ballet, y cómo se logra fusionar esto con el folclor, con los bailes populares y con las expresiones contemporáneas...".
Éste debe ser un espectáculo que se aproxime a las expresiones que identifican a la nación cubana, desde la danza y la música, en ese sentido Gabriela Pérez Quintero, directora artística y regisseur comentó:
"...nuestro propósito con éste espectáculo es mostrar el amplio abanico de posibilidades que tiene la Compañía.
Por eso lo hemos conformado con acercamientos a las expresiones folclóricas de matriz africana, a la danza contemporánea, al ballet clásico y a los bailes populares...".
La música será la otra protagonista en Identidad, reconocidas melodías cubanas han sido escogidas para conformar la banda sonora del espectáculo.
Temas popularizados por artistas como Cimafunk, Toques de Río, Telmary, e Irakere, por solo citar algunos, complementarán la propuesta danzaria, ejecutados en vivo por un formato de jóvenes y talentosos instrumentistas dirigidos por Darío Orta Vásquez.
Para el futuro una sugerencia atrevida
La creatividad de los miembros del Ballet Fumezcu no se detiene y aunque no se han estrenado ante el público ya preparan su segunda entrega.
"...en los meses de abril y mayo del próximo año estrenaremos nuestro segundo espectáculo, estará dedicado a recordar las décadas de los 60', 70' y 80' en Cuba.
La elegancia, el buen vestir y otras características de esos años regresarán al escenario, desde nuestra visión ...", comentó el líder de la compañía.
La propuesta incluirá los accesorios más utilizados entonces (abanicos, vestuarios, maquillaje y sombreros), al tiempo que recreará lo que sucediá en los espacios públicos más concurridos.
"...la propuesta hará alución a Yarini y ha sido pensada desde los cánones escénicos del espectáculo musical.
Como particularidad en él los músicos intercambiarán con los bailarines, propiciando un ambiente de interacción que esperamos sea del agrado del público...", puntualizó Héctor Alejandro Ramírez González, director general y coreógrafo.
También la música tendrá sus especificidades para ese momento, tema al que hizo referencia Darío Orta Vásquez, director musical de la compañía:
"...esta nueva entrega nos tieme muy contentos, porque será la oportinidad para estrenarnos como compositores.
Especial será que toda la melodía que se escuche habrá sido compuesta por nosotros mismo, lo que representa una gran responsabilidad para los instrumemtistas.
Los temas que sonarán allí tienen que provocar un acercamiento a aquellos años, y a su vez ser de estos tiempos, por eso hay que estudiar mucho...", puntualizó.
La Compañía Ballet Fumezco está integrada por más de 40 jóvenes artistas identificados con las expresiones de la cultura cubana, pero deseosos de mostrar sus maneras de ver la danza, desde los códigos que mueven su época, algo que puede ser transgredor e irreverente, pero que merece un voto de confianza.
