sábado, 16 de junio de 2018

Compañía de danza Kubasoy volverá con su taller de verano



Para satisfacer una expectativa latente en no pocos cubanos, la compañía de danza Kubasoy regresará con el Festival de Varano “Casino de Kubasoy”, iniciativa que llegará a su cuarta edición en la Casa de Cultura del municipio Diez de Octubre, del 16 al 21 de julio.
 
Los bailarines del grupo se desdoblarán en profesores para ayudar a que los interesados en aprender a ejecutar los pasos básicos del Casino.

Tres han sido los horarios concebidos para esta esperada acción comunitaria: el primero concebido principalmente para niños mayores de nueve años, sesionará entre diez de la mañana y doce del mediodía, el segundo horario será entre las cuatro y las seis de la tarde, y el tercero comenzará a las 18:30, extendiéndose hasta las 20:30 horas.

Las inscripciones ya están abiertas en la propia institución de la Calzada del Diez de Octubre, esquina a Carmen y los interesados pueden llegar a su recepción o matricular a través del número telefónico 7640-1028, en días y horarios laborables.

Como novedad para esta edición destacan noches caracterizadas por diferentes  géneros como el Danzón, el Jazz, el Feeling y otros que han incidido en la historia del Casino como ritmo, de igual manera una de las noches tendrá como centro el trabajo del Movimiento de Artistas Aficionados y la presentación de ruedas de casino de especial aceptación del público.

Instructores de arte de La Habana protagonizarán etapa vacacional


La proximidad de la etapa estival es motivo para que instituciones culturales y artistas diseñen acciones encaminadas al disfrute de la población, de manera sana y educativa.
 
La Brigada JoséMartí de Instructores de Arte en La Habana, también se involucra con una programación especial que fue comentada a este espacio por Eily Viñales Tamayo, presidenta de la organización juvenil en la capital cubana. 

Entre las motivaciones para este año, en los afiliados a esta institución destacan las cuatro décadas del sistema de Casas de Cultura en el país, por lo que estos profesionales incrementarán el número de talleres a impartir durante la etapa, en todas las manifestaciones del arte.

De igual manera en otras instituciones de los municipios habaneros serán impartidos talleres de música, danza, dibujos y otras artes, alternativas a las que podrán asistir todos los interesados, sin límite de edad.

El Anfiteatro del Gran Parque Metropolitano de La Habana será la sede del acto inaugural para el verano, desde el quehacer de los jóvenes instructores de arte, espacio donde confluirán unidades artísticas representativas de la  ciudad, dentro del movimiento de aficionados.

El Parqueo de la heladería Coppelia y el Centro Cultural Belén (sede de la dirección nacional de la Brigada) serán  otros espacios que servirán de  escenario a las acciones de la más joven generación de instructores de arte en la capital cubana.

Entre los propósitos de los organizadores del programa destaca el compromiso de estos jóvenes con la cultura nacional, por lo que en sus actuares estará presente la preservación de los elementos de la creación artística y literaria que identifican a Cuba como nación

jueves, 14 de junio de 2018

El profesor Pacheco un fiel seguidor del Che


Conversar con alguien que haya tenido el privilegio de compartir momentos especiales con los artífices de la Revolución cubana es siempre un gusto, por la facilidad con que nos llevan hacia ellos, y ese es el placer que quiero compartir hoy con nuestros oyentes.

El maestro Jorge Luís Pacheco, alguien muy respetado en el mundo de la música por los grandes e imprescindibles aportes que ha hecho al canto lírico y a la música de concierto en el país, tuvo varias vivencias con el Guerrillero Heroico, que compartió gustoso con nosotros.

“Mi relación con el Che fue breve, aunque ha sido tan duradera como eterna.

La primera vez que lo vi de cerca, tenía 18 años y estaba como Segundo Jefe de la Batería número siete de Obuses 122mm que dirigía el Comandante Pedro Miret Prieto.

Como es conocido el Che tenía allí sus oficinas y un día llegó por la Posta 1, y lo que más me llamó la atención fue que lo primero que visitó fueron los baños, los dormitorios, los comedores y el polígono donde hacíamos los entrenamientos, lugares por donde casi nunca comienzan las visitas…

Como concepto general pienso que el Che estaba dotados de la condición de “misioneros”, el tránsito en bicicleta, el cruzar un río con el riesgo de ahogarse, para ir a ver a los leprosos, desafiando el asma, el estar siempre preocupado por su condición de médico, son ejemplos de su humanidad…

En este sentido es que asumo la imagen del Che”, comentó el destacado intelectual

La segunda ocasión en que estuvo cerca del Che la recordó así: “…nos mandaron a contribuir con un plan de conformación de terrazas para los actuales bosques  de Eucalipto, en un poblado de Pinar del Rio, y allí se apareció un día él.

Sostuvo una larga conversación con nosotros, de la que recuerdo dos de sus reflexiones, que se me quedaron muy grabadas: “…ninguna verdadera sociedad desarrollada se construye con tecnócratas, y la otra idea fue un consejo que nos dio y en el que nos decía: nunca pierdan el más mínimo tiempo que tengan “libres” para enriquecerse culturalmente…”, continuó hurgando en sus recuerdos

Luego de cumplir con las misiones encomendadas fue premiado por el Comandante en Jefe con una beca en la antigua URSS donde comenzaría los estudios de Ingeniería Sidero Metalúrgica, carrera que interrumpió al ser aceptado por el Conservatoria Chaikovski de Moscú, una vez conocido su talento para el canto lírico.

En el diálogo con el maestro Jorge Luís Pacheco, artífice de mucho de lo hoy se aprecia en el canto lírico y en la música de concierto en Cuba, conocimos de su resistencia a abandonar el compromiso contraído con Fidel, para formarse como Ingeniero Sidero Mecánico, en la URSS, lugar donde finalmente aprendió del buen arte, gracias a una orden del Che.

“…un tiempo después de mi negativa a cambiar de carrera, llegó un telegrama a la Embajada en el que firmado por el Comandante Ernesto Che Guevara, Ministro de Industria,  se ordenaba mi traslado inmediato a la Facultad de Canto del Conservatorio, orden la que no pude resistirme…

En agradecimiento a tal indicación, el maestro de generaciones dejó plasmado el siguiente comentario en su tesis de Maestría en Ciencias Pedagógicas en  Canto Lírico a nivel superior: “….al inolvidable Che Guevara, quien accedió a la solicitud de la entonces Ministra de Cultura de la ex Unión Soviética, y en consecuencia ordenó mi traslado hacia la facultad de canto, perdón, perdón una y otra vez si en aquel momento no entendí cuánto puede hacer la cultura por mi país…”

Medio siglo dedicado a la pedagogía, varias experiencias en guerras dentro y fuera del país, en calidad de combatiente y un ferviente amor por su país, son los elementos que adornan la personalidad del profesor Pacheco, como se le conoce en el mundo del arte.

Antes de culminar la entrevista quisimos conocer su visión sobre el Che, justamente cuando cumpliría nueve décadas, a lo que respondió: “…él siempre va a estar, es como que pasado tantos años fuéramos tan osados y tan tontos de decir que ya pasó mucho tiempo de la época de Martí.

Pienso que con el Che pasa lo mismo que con otros héroes de este pueblo, por las razones que sean se les un poco más por su bravura de guerreros que por su capacidad intelectual, por su rica cultura, por su visión holística de la vida, es el caso de Rafael María de Mendive, José Antonio Saco y muchos otros…

Tal vez por no haber tocado esas otras aristas, explicado y llevado a nuestros jóvenes esa importante información, los hemos convertido en tabú y no en seres normales, con sus grandes virtudes y con sus defectos como seres humanos…”