martes, 17 de diciembre de 2013

Premios Corales 35 Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano



Largometrajes de Ficción
Primer Premio Coral: Heli, de Amat Escalante (México, Francia, Alemania, Holanda)
Premio Especial del Jurado: Wakolda, de Lucía Puenzo (Argentina, Noruega, España, Francia, Estados Unidos)
Segundo Premio: El lugar del hijo, de Manuel Nieto Zas (Uruguay, Argentina)
Tercer Premio Coral: Gloria, de Sebastián Lelio (Chile, España)
Mención del Jurado: Pelo Malo, de Mariana Rondón (Venezuela, Perú, Alemania)
Premio Coral de Dirección: Lucía Puenzo, por Wakolda (Argentina, Noruega, España, Francia, Estados Unidos)
Premio Coral de actuación femenina: Vanessa Alvario, por No robarás… (a menos que sea necesario) (Ecuador)
Premio Coral de actuación masculina: Diego Peretti, por La reconstrucción (Argentina)
Premio Coral de guión: Boccaccerías habaneras, de Arturo Sotto Díaz (Cuba)
Premio Coral de Fotografía: Arauco Hernández Holz, por El lugar del hijo (Uruguay, Argentina)
Premio Coral de Dirección Artística: Pamela Chamorro, por Cirqo(Chile, España)
Premio Coral de Edición: Mariana Rodríguez, por Tercera llamada(México)
Premio Coral de Música Original: Oscar Camacho, por El Mudo (Perú, Francia, México)
Premio Coral de Banda Sonora: Ramiro Fierro, por Yvy maraey / Tierra sin mal (Bolivia)

 Ficción-Cortometrajes
Premio Coral: Casting, de Eduardo del Llano (Cuba)
Mención del Jurado: Irene, de Alexandra Latishev (Costa Rica)

Ópera Prima
Primer Premio Coral: El lobo detrás de la puerta, de Fernando Coimbra (Brasil)
Premio Especial del Jurado:La jaula de oro, de Diego Quemada-Díez (México, España)
Segundo Premio Coral: Los insólitos peces gato, de Claudia Sainte-Luce (México, Francia)
Tercer Premio Coral: El verano de los peces voladores, de Marcela Said Cares (Chile)
Mención del jurado: Las lágrimas, de Pablo Delgado Sánchez (México)
Premio Coral a la mejor contribución artística: Irandhir Santos, por su trabajo actoral en Tatuaje

 Documental
Primer Premio Coral: Elena, de Petra Costa (Brasil)
Premio Especial del Jurado: La última estación, de Cristian Soto Hermosilla y Catalina Vergara (Chile, Alemania)
Segundo Premio Coral: La Gorgona, historias fugadas, de Camilo Botero Jaramillo (Colombia)
Tercer Premio Coral: Mi amiga Bety, de Diana Garay (México)
Premio Coral a la mejor obra sobre América Latina de un realizador no latinoamericano: Seré asesinadode Justin Webster (Gran Bretaña, España, Dinamarca)
Mención Especial del Jurado: La Casona, Juliette Touin (Cuba)

Cartel
Mejor cartel: a Nelson Ponce, por Homenaje a René Azcuy (Cuba)

Animación
Primer Premio Coral: O menino e o mundo, de Alê Abreu (Brasil)
Premio Especial del Jurado: Carne, de Carlos Alberto Gómez Salamanca (Colombia)
Segundo Premio Coral: Historias de cronopios y de famas, de Julio Ludueña (Argentina)
Tercer Premio Coral: Padre, de Santiago «Bou» Grasso (Argentina, Francia)

 Guión Inédito
Pacto, de Pedro Miguel Rozo Flórez (Colombia)

 Premio de Postproducción “Nuestra América Primera Copia”
Vestido de novia, de Marylin Solaya (Cuba)- 60 000 dólares y servicios patrocinados por la Burbuja Sonido, Tauro Digital, Boogieman Media,  Assimilate y Aracne.
La salada, de Martin Hsu (Argentina)- 40 000 dólares
R. Lorena, de Isidora Marras (Chile)-25 000 dólares y servicios patrocinados por la Burbuja Sonido y Tauro Digital.
Venecia, de Enrique Álvarez (Cuba)- 25 000 dólares

Fipresci 
El lugar del hijo, de Manuel Nieto Zas (Uruguay, Argentina)

 Signis
La reconstrucción, de Juan Esteban Taratuto (Argentina)

Jazz en Cuba, un poco de historia





Hacia mediados del siglo XX, mientras el jazz era un fenómeno cada vez más común dentro de la música cubana, las vivencias formadoras de músicos cubanos en los Estados Unidos de América continuaban hacia el apogeo.

La marcada influencia norteamericana en la música de la Isla  se evidencia incluso en las más populares composiciones cubanas, como es el caso del compositor, violinista y director Enrique Jorrín entre cuyas obras se cuenta Silver Star, y el violinista, compositor y arreglista cienfueguero Rafael Lay, con Charleston-cha

Otras figuras cubanas signadas por las sonoridades norteñas fueron la pianista Ñola Sahig (Ciego de Ávila, 1930) quien sobre 1950 se trasladó a Nueva York, perfeccionándose en la Juilliard School of Music durante cinco años, y también estudió en Chicago, el compositor y tresero Arsenio Rodríguez (Güira de Macurijes, Matanzas, 1911-1972) integró un sexteto llamado Boston.

Celeste Mendoza (La Reina del Guaguancó), Félix Chapotín, Arsenio Rodríguez, Carlos Fariñas y muchas otras glorias de la música cubana estuvieron profundamente influenciados por la música norteamericana, lo que llega hasta nuestros días con un Festival de 29 años que lleva por nombre Jazz Plaza.

El certamen ve la luz 14 de febrero de 1979, para celebrar el Día de los Enamorados (San Valentín), comienza en la Casa de la Cultura del municipio habanero Plaza de la Revolución, sita en Calzada y 8.

El encuentro devino en  franca festividad y ambiente popular, escenario ideal para la participación de distintas generaciones de jazzistas cubanos, desde el maestro Armando Romeu hasta la más joven y virtuosa generación

Poco a poco surgieron otras subsedes y espacios en el mismo municipio: el Club Maxim; el Hotel Habana Riviera,  la piscina del Hotel Nacional,  night club como la Zorra y el Cuervo, Jazz Café, el snack bar Chico O’Farrill, y los Hoteles Nacional, Presidente y Riviera; teatros como el Amadeo Roldán, el Nacional y el Mella

La Casa de Cultura abriría su Jazz salón y se extendieron las subsedes a otros municipios capitalinos, como el teatro Karl Marx, en el aledaño municipio Playa. 

Memorables resultan aun la actuaciones en la Casa de la Cultura de los legendarios grupos Irakere,  Emiliano Salvador y su grupo, Bobby y su Afrojazz, NG la Banda, Frank Emilio, Guillermo Barreto, Orlando Cachito López, Lázaro Morua  y otros. 

 A partir de 1982 el Jazz Plaza adquiere carácter internacional con la participación de solistas y grupos de varios países: Bárbara Dane, Dizzy Gillespie, Dave Valentín, Flora Purín, Rey Hargrove, Boby Sanabria, entre otros, que han prestigiado estos sublimes momentos y han convertido a La Habana, durante 31 años consecutivos en la capital del jazz mundial. 

Con su presidente de honor, el Maestro Chucho Valdés, el Jazz Plaza se multiplica y crece, y cada concierto se convierte en una verdadera fusión de ritmos, desde los estándares más clásicos hasta el movido LatinJjazz.

Para esta edición, la 29 del Festival Internacional, engalanarán los escenarios más de treinta agrupaciones nacionales y once foráneos entre los que se encuentran los norteamericanos Arturo O’Farrill, Andrea Brachfeld y Jazz Urbaine, quienes junto a exponentes de Canadá, Suiza, Austria, Argentina, Holanda, Islas Bermudas y México garantizarán un buen final de año, entre el 19 y el 22 de diciembre.