Foto Jorge Luís Sánchez Rivera |
Adiós a las uñas largas,
este es la primera idea que viene a la mente cuando se escucha hablar de mujeres
percusionistas, pero con Obiní
Batá
esa es una regla que no funciona.
Siete hermosas cubanas sacan
de los cueros de los tambores los más auténticos sonidos sin perder la femineidad:
maquillajes, uñas largas, vestuario seductor y movimientos escénicos
provocativos hacen de sus espectáculos momentos de deleite inolvidable.
Durante sus 22 años la
agrupación ha tenido que sortear innumerables obstáculos objetivos y subjetivos
comenzando por la mirada cuestionadora de los hombres al considerar un
intrusismo el que las féminas incursionen en las fuertes sonoridades de los
tambores batá, instrumento considerado por muchos privativos del género
masculino.
Pero la historia ha
demostrado que también las del llamado “sexo débil” pueden hacerlo sin agredir
los espacios exclusivos para los hombres (marco religioso), y es justo lo que demuestra
Obiní Batá: sacar los mejores sonidos a los cueros de una manera fascinante.
Dirigidas por la Máster en
Ciencias Eva Despaigne Trujillo las jóvenes “obinisas” (como también se les
conoce) ejecutan un programa que incluye danzas y cantos populares y tradicionales, pregones y un repertorio ancestral contentivo
de piezas del repertorio internacional de matriz africana (cantos y danzas
congas, dahomeyanas y haitianas).
La fiesta de cumpleaños tuvo
lugar en la Asociación
Cultural Yoruba de Cuba (Prado y Monte), espacio que resultó
insuficiente para los espectadores que las acompañaron en sus cantos a los
dioses del panteón Yoruba Yemayá y Babalú Ayé, en la ejecución de un singular número
con la percusión menor y en un viaje
imaginario a través de renovados pregones acorde con la Cuba de hoy.
La historia y el valor de
estas mujeres abrió las puertas a otras agrupaciones femeninas que les siguieron
los pasos en el afán de incursionar en la percusión afro cubana sin miedos a la
censura de una sociedad machista.
No hay comentarios:
Publicar un comentario