El Centro gestor del Carnaval de La Habana evaluó el resultado de su trabajo durante 2021, período en el que jugaron un papel importante en el apoyo al combate a la pandemia, convirtiéndose en el primer centro de la cultura en la capital que cedió sus espacios para la instalación de un vacunatorio.
El azote decl COVID-19 durante el período impidió el cumplimiento de los planes de comercialización, el desarrollo del festejo más popular de la ciudad y del Festival de la Salsa, de manera presencial, aunque llegaron al público desde la internet y la señal de la televisión nacional, con propuestas que en alguna medida mantuvieron cerca de sus públicos los más importantes eventos.
La entrega de sus trabajadores en centros de aislamiento, una redoblada presencia en las comunidades, actuaciones de espectáculos infantiles en Casas de niños sin amparo familiar, actividades festivas dedicadas a los jóvenes, realización de acciones conmemorativas en fechas históricas, actos de reconocimientos al personal de salud y su protagonismo en la Gala por los 502 años de La Habana, entre otras acciones caractetizaron la labor del colectivo que dirige Georgina Cortés Rodríguez.
Aunque no todo fue satisfactorio durante 2021, el colectivo del Centro del Carnaval de La Habana se creció en sus rangos de acción y alcances, desdoblándose en áreas de desarrollo poco explotadas anteriormente y exhibiendo sus potencialidades para rediseñar las acciones ante situaciones de contingencia.
La deficiente capacidad tecnológica, los obstáculos que representan algunos mecanismos económicos y burocráticos, y la obsolescencia de la tecnología para el cumplimiento de su principal encargo social, son de los elementos que pone a la entidad en desvebtaja en el actual entorno económico nacional, por lo que fueron evaluados con profundidad en el encuentro.
A lo que se suma la necesidad de que las estructuras gubernamentales y culturales de cada territorio asuman la responsabilidad que les corresponde con las agrupaciones carnavalescas que representan a los municipios.
Vale resaltar el demostrado compromiso con la Revolución, expresado en el enfrentamiento a los sucesos ocurridos el once de julio y los planificados para el quince de noviembre.
De igual manera su incidencia en el desarrollo social de las comunidades fue un elemento resaltado durante la sesión de trabajo, a partir de lo que se evidencia en materia de satisfacción de expectativas comunitarias.
Sin dudas el año precedente fue de especial significación para el colectivo de trabajo del Centro del Carnaval de La Habana, donde sus técnicos, especialistas y obreros demostraron potencialidades para emprender de manera satisfactoria nuevos desafíos que los pongan a tono con las exigencias del momento.
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